El apagón masivo que encendió la luz humana: una semana de oscuridad y reencuentro en España

Una semana en la que toda España ha estado pendiente del apagón masivo que sufrimos el pasado 28 de abril que dejó sin luz a gran parte de la península ibérica y Portugal. La causa del apagón aún se investiga, pero se cree que pudo haber sido causado por una combinación de factores, incluyendo la caída de la generación de energía en plantas solares, problemas en la interconexión con Francia, y posiblemente una caída en los sistemas de protección de la red.

Este acontecimiento histórico ha hecho reflexionar a la sociedad. Primero, incitando a que cada hogar tenga un kit de emergencias 72 horas como pidió la UE hace un mes y, segundo, haciéndonos ver que somos totalmente dependiente de la electricidad y los dispositivos móviles, esos que nos quita la oportunidad de mirarnos a los ojos y compartir momentos con nuestros seres queridos.

A pesar de esta catástrofe, las redes sociales nos han dejado varios momentos virales de como todo un país hizo frente a esta alarmante situación desde el punto en el que le pilló, enseñándonos que no todo es tan malo como podemos imaginar, sino confirmando una vez más que el pueblo salva al pueblo.

La colaboración de Ana Guerra en el último tema de Leire Martínez

Leire Martínez y Ana Guerra se encontraban en un tren Iryo con destino Zaragoza cuando de repente el apagón interrumpió su trayecto a la altura de Salillas de Jalón. La vasca y la canaria han contado a través de su perfil de redes sociales cómo se vivió el momento y ambas se han mostrado agradecidas a la tripulación.

Aunque, como al resto de españoles, les tocó bajar del convoy y reubicarse en lugar indicado por los profesionales por medio de las vías. No obstante, cuando llegó un poco de calma, las artistas no dudaron en compartir un momento divertido con todos los pasajeros como el de hacer una versión juntas del último tema de Leire.

Pasajeros del funicular y metro de Bilbao bajan andando

Otro de los momentos que se ha extendido en las redes sociales ha sido el que les tocó vivir a los pasajeros del famoso funicular de Bilbao que sube al monte de Artxanda. Estos se vieron obligados a bajar andando por las vías tras el apagón masivo de luz.

Lo mismo ocurrió con el metro de Bilbao, donde los pasajeros tuvieron que salir del túnel a través de las vías, como les indicaron el personal de seguridad. Dentro de lo vivido, no hubo ningún tipo de desgracia y fue por poco tiempo, en comparación con otros españoles que estuvieron durante 10 horas en un AVE o 6 horas atrapados en un ascensor hasta que pudieron ser rescatados.

Los jóvenes son la luz de España

El gran apagón envolvió a España en la oscuridad, pero al mismo tiempo iluminó lo que hacía tiempo dormía en las sombras de la rutina: la calidez de lo humano. Calles normalmente dominadas por el ruido tecnológico se llenaron de risas, conversaciones cara a cara y una solidaridad espontánea que floreció en cada esquina.

Sin televisión ni redes sociales, los parques se convirtieron en centros de encuentro, las terrazas se abarrotaron de gente redescubriendo el arte de hablar, y los balcones volvieron a ser miradores al alma del barrio. En medio del desconcierto eléctrico, surgió un reencuentro inesperado con lo esencial: la compañía, el silencio compartido, y la belleza de vivir el presente sin filtros ni pantallas.

Uno de los momentos más compartidos y comentados ha sido el vídeo en el que un grupo de jóvenes se reunió para cantar "Corazón Partío" de Alejandro Sanz, delante de una señora mayor, creando un momento mágico. Al final, una de cal y otra de arena, hay que aprender de estos momentos y que no queden en el olvido. Ahora, es momento de hacer autocrítica y vivir el momento.