Arteche y Ormazabal aceleran ampliaciones ante el aumento del negocio en redes eléctricas

El reciente apagón general en la península ibérica ha situado el debate sobre la fortaleza de la red eléctrica a otro nivel. Y la necesidad de inversión en España, donde esas carencias se han hecho evidentes por ese incidente, es en realidad común a casi todas las economías desarrolladas para cumplir los objetivos de reducción de emisiones.

En Euskadi hay casi medio centenar de empresas orientadas de una u otra forma al creciente negocio de la electrificación, que en España se calcula repartirá inversiones por valor entre 2.000 y 4.000 millones los próximos años para atender a las necesidades de las renovables, el hidrógeno o el coche eléctrico.

Junto a Iberdrola e Ingeteam, dos de las que cuentan con mayor tamaño y proyección internacional son Arteche y Ormazabal, del grupo Velatia, que miran a España y a Europa pero por su dimensión necesitan ir más allá con posiciones consolidadas en mercados clave como Estados Unidos.

El rápido crecimiento de los números de ambas firmas es prueba de la oportunidad que abre la descarbonización para el sector, que se prepara casi a contrarreloj para poder atender toda la demanda prevista los próximos años.

Proyecto de Arteche en la red eléctrica

Ampliación en México

Hasta un 15% incrementó su capacidad productiva Arteche el pasado año y ya hay planes en marcha para seguir creciendo. Tal y como informó el director general de la compañía vizcaína, Luis María Pérez, en la última junta, está por ejemplo en marcha una ampliación de 13.000 metros cuadrados en la planta mexicana de Tepeji del Río, cerca de Ciudad de México, que impulsará la capacidad del grupo en norteamérica los próximos años.

"Esta zona va a tirar mucho de nosotros", señalaba Pérez en referencia a México y Estados Unidos y a ese momento dulce que vive la compañía en norteamérica, que es común por otro lado a otros grandes mercados. Arteche, líder mundial en la fabricación de transformadores, ha ampliado también su capacidad en Europa, con Mungia como eje central, o China.

Una junta de Arteche

La firma familiar vasca, camino de los 500 millones de facturación y 2.700 trabajadores, va entrando en nuevos mercados geográficos y también en nuevos productos como es el nicho del almacenamiento energético, cada vez más relevante y donde ha adquirido posiciones a través de la finlandesa Teraloop.

Arteche invierte en torno a un 3,5% de la facturación anual en innovación, tanto tecnología como formación, como palanca para actualizar y mejorar la respuesta de sus equipos.

Planta central de Ormazabal en Igorre

20 millones en Igorre

En esa línea, Ormazabal ha anunciado recientemente 20 millones para reforzar su planta central de Igorre. Todo el grupo Velatia lleva un tiempo en un proceso de reconfiguración de las instalaciones que supondrá mover algunas piezas precisamente para disponer de más espacio en la fábrica central de Ormazabal y poder aumentar capacidad y dar salida a nuevos productos.

Según explicó la empresa principal de Velatia, la inversión servirá para incrementar los ritmos de fabricación de las nuevas celdas sin SF6, es decir, con una alternativa a los gases contaminantes, iniciada el pasado año y que el mercado cada vez demanda en mayor cantidad.

Ormazabal, por encima de 800 millones de facturación, explicó que el año pasado invirtió 24 millones de euros en innovación.

En cuanto a Ingeteam, otro de los principales actores vascos del sector, celebrará su junta de accionitas a finales de este mes de mayo pero el pasado año ya anunció una importante inversión en un laboratorio en Navarra que estará operativo en los próximos meses.

La ingeniería vizcaína anunció en 2022 más de 200 millones en inversiones para los años siguientes para hacer frente al crecimiento de las renovables y destina a I+D un 5% de su facturación anual.