La playa de Euskadi de la que se enamoró Bruce Springstreen: 600 metros y rodeada de belleza natural

Gipuzkoa está en el punto de mira de los famosos, desde Elsa Pataky y Chris Hemsworth, quienes se hospedaron hace unos años en un caserío de Hondarribia, hasta Brad Pitt, John Travolta, Woody Allen, Oliver Stone, Pamela Anderson y Bruce Springsteen, entre otros.

Este último, que ya visitó la región cuando actuó en la villa durante los años 2008, 2012 y 2016, volverá a poner el pie en la capital guipuzcoana el próximo 21 y 24 de junio con sus conciertos en San Sebastián. 

En 2009, antes de tocar en Bilbao, se bañó en la playa de Ondarreta, con 600 metros de longitud y bajo el tan popular monte Igueldo con el pianista Roy Bittan y su mujer Patti Scialfa. Lo asegura El Correo en su artículo ¿Qué tiene San Sebastián que le gusta tanto a Springsteen?

Su amor por Donostia

Euskadi es uno de los destinos favoritos no solo de los propios españoles, sino de los turistas. Un lugar que va adquiriendo cada vez más fama con el paso de los años.

Prueba de ello son las visitas que recibió en 2023, año en el que logró, según datos del Gobierno Vasco, la mejor situación turística de la historia. De esta manera, el territorio vasco registró 4,3 millones de turistas el año pasado sin contar con el mes de diciembre.

Por provincias, Gipuzkoa fue la región con el mayor número de visitantes (1,5 millones). Un aumento que se dio en cada uno de los meses del año pasado, según un estudio del Instituto Vasco de Estadística (Eustat).

Incluso hace unos años, la provincia era conocida entre las grandes personalidades, como el cantante Bruce Springsteen, quien ha acudido en más de una ocasión.

Ya dejaba claro su amor por la capital guipuzcoana hace años. El diario ABC plasmó las declaraciones que el cantante hizo al promotor Iñigo Argomaniz en su artículo Champán y vino de Toro para Bruce, quien aseguró que volvería a la ciudad después de dejar el Hotel María Cristina: "San Sebastián es una ciudad a la que siempre hay que volver".

Es un lugar, destacó, donde uno puede pasear tranquilamente sin que le molesten, donde puede comer bien y donde puede bañarse en la playa. En 2016 volvió a pisar Donostia para dar otro concierto.

Se pasó a comer por el restaurante Bokado, donde pedía pescado y una tarta de queso. Pero, sin duda, el postre que enamoró a Springsteen fue una tarta de queso de Zuberoa, de los hermanos Arbelaitz y que anunció su cierre hace no mucho.

En este clásico de Donostia e icono de la cocina local se preparaba de una manera única: añadiendo los quesos roquefort e Idiazabal ahumado. De este modo, consiguió elaborar una obra de arte cremosa que conquistó el corazón del cantante.

Al artista también lo pillaron visitando el Aquarium, comprando golosinas en Sagüés, acompañando a sus hijos a hacer surf a la playa de La Zurriola y bebiendo patxaran en el bar Morga del Casco Viejo, como indica El Correo.