Laboratorio de Sener para pruebas aeroespaciales
Sener duplica su plantilla en Euskadi desde el ERE de 2020 y supera los 700 trabajadores
La ingeniería familiar vizcaína, que abrirá una nueva fábrica de Zamudio, suma cinco años de expansión gracias al impulso de las renovables y el sector aeroespacial y de defensa
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El aumento de plantilla refrenda el salto adelante que ha dado Sener en los últimos años al calor del empuje de la energía renovable, los sectores espacial y de defensa incluso nichos de negocio en plena irrupción como es el mundo de los data centers.
La compañía familiar con sede en Getxo deja atrás definitivamente el punto crítico de 2020, año en que tuvo que activar casi cien despidos con afección en Euskadi ante la bajada de proyectos, y relanza el volumen de plantilla hasta superar los 4.000 empleados en todo el mundo.
El salto cualitativo se ha producido este pasado ejercicio, con medio millar de trabajadores más en todo el grupo, de los que casi 300 corresponden a los centros de trabajo en España (Euskadi, con eje central en Getxo e instalaciones en Erandio, Barcelona, Madrid y Valencia).
La firma de la familia Sendagorta vive en gran medida de proyectos de infraestructuras y grandes obras (en 2022 se adjudicó el soterramiento del TAV en Vitoria), con gran presencia en el extranjero, en especial en países latinoamericanos como Brasil y México, y está sabiendo aprovechar tres grandes olas como son la descarbonización, la digitalización y el auge de defensa.
Proyecto de Sener para la red de monorraíl automático de El Cairo/Sener
Renovables e hidrógeno
En ese sentido, Sener es un actor reconocido a nivel internacional como cerebro de grandes proyectos renovables (estuvo por ejemplo en la construcción de las mediáticas plantas solares de Ouarzazate en Marruecos), y lidera además nichos de energía limpia incipientes pero con gran proyección como son el hidrógeno verde o la eólica marina flotante.
En el campo del hidrógeno la ingeniería vizcaína ha diseñado el primer electrolizador que ha entrado en operación en Euskadi. Se trata del generador de 2,5 MW que ha puesto en marcha Petronor como primer paso hacia el futuro ecosistema de hidrógeno que pretende levantar la filial de Repsol y que desembocará en un aparato a mayor escala de 100 MW.
Electrolizador de 2,5 kW de potencia puesto en marcha por Petronor en Muskiz.
Además, Sener, que ya participa en grandes parques eólicos offshore, ha diseñado su propio sistema de soporte de molinos flotante con el que aspira a competir con otros líderes en este campo como Saitec.
Sener ya es, de hecho, una de las candidatas a inaugurar la carrera de la eólica marina en España ya que se postula para construir, cuando el proceso regulatorio desemboque en el pistoletazo de salida, los primeros parques en Canarias.
El presidente del Instituto de la Empresa Familiar (IEF) y presidente de Sener, Andrés Sendagorta.
Nueva planta en Zamudio
A todo ello hay que sumar el paso adelante en la ingeniería de los centros de datos, una industria al alza, tras la compra de Quark, además de una larga lista de proyectos para misiones espaciales y una posición sólida en la industria de defensa.
La compañía inició en 2023 la construcción de una nueva planta en el parque tecnológico de Zamudio para dar cauce a este incremento de los proyectos que estará operativa en unos meses.
En lo que se refiere al País Vasco, Sener superó este pasado mes de abril la cota de los 700 trabajadores, principalmente en su centro principal de Getxo, lo que en números redondos supone prácticamente duplicar el volumen de empleo respecto a ese bache de 2020.
